Ensenada
Grave denuncia en Astillero Río Santiago: sectores internos piden la renuncia de la conducción gremial tras presuntos ascensos irregulares
La tensión en Astillero Río Santiago (ARS) sigue en aumento luego de que trascendiera una grave denuncia por presuntas irregularidades en los ascensos otorgados a integrantes de la conducción de ATE Ensenada. En distintas áreas del Astillero, trabajadores comenzaron a votar mandatos sectoriales que exigen explicaciones, la renuncia de los responsables y medidas concretas para garantizar la transparencia sindical.
28 de Octubre de 2025
En el sector Soldadura, los operarios reclamaron la renuncia inmediata de los miembros de la Comisión Administrativa que se habrían otorgado categorías de personal superior, y exigieron que “vengan a dar la cara a la asamblea de sector”. Además, repudiaron que “se haya priorizado dar varias categorías a dirigentes gremiales antes que a los compañeros de producción”.
Los trabajadores de Soldadura también demandaron la reapertura de paritarias y el debate salarial en asamblea de sector, cuerpo de delegados y asamblea general, con el objetivo de restablecer la antigüedad de tres años entre categorías. Finalmente, votaron pasar a un estado de asamblea permanente y unificar los reclamos con otros sectores “por todas las categorías rezagadas”.
Desde la asamblea de turno, se resolvió elaborar una nota dirigida a la Comisión Administrativa y a la empresa para exigir respuestas concretas sobre las categorías otorgadas a Diego Seimandi y Lorena Benaglia —ambos integrantes de la conducción gremial—. En caso de confirmarse las irregularidades, los trabajadores pidieron su renuncia inmediata a los cargos sindicales. Además, se reclamó un listado público de los compañeros con antigüedad suficiente para el ingreso de sus hijos y se convocó a una nueva asamblea el miércoles, donde se definirán los plazos de respuesta.
En el sector Gradas, el mandato fue claro: solicitar al Cuerpo de Delegados la convocatoria a una Asamblea General, y en ella, exigir la renuncia de Ibendal, Seimandi y Benaglia “por actos de corrupción”, al considerar que “mientras a los trabajadores se les negaban recategorizaciones, los dirigentes se beneficiaban personalmente”. En caso de no prosperar el pedido, los trabajadores plantearon la necesidad de unificar sectores para garantizar la realización de la Asamblea General.
En Mecánica, los mandatos incluyeron el pedido de un listado de las categorías actuales de los dirigentes que pasaron al gremio, la renuncia de los responsables (incluido Ibendal), la retención de tareas hasta la presencia de la Comisión Administrativa, y la exigencia de un listado actualizado de ingresos. Además, se pidió la designación de encargados faltantes en tornería y fresado, así como la cobertura del puesto de supervisor para torno.
En paralelo, los trabajadores dentro del Astillero denunciaron públicamente que la cúpula de ATE Ensenada, habría beneficiado a sus propios integrantes con ascensos y aumentos salariales en los últimos años, violando el estatuto sindical, que impide modificar jerarquías mientras se ocupan cargos gremiales activos.
Desde la conducción de ATE Ensenada aún no hubo declaraciones oficiales, pero el clima en los talleres del ARS es de malestar generalizado y creciente presión. “Esto recién empieza”, advirtieron los trabajadores, que anunciaron nuevas asambleas en todos los turnos para definir los próximos pasos.
