Insólita propuesta de una diputada de UxP: impulsan un impuesto al gas que emiten las vacas

La idea apunta a que los productores paguen por el impacto contaminante asociado a las flatulencias y eructos del ganado, algo que, según fundamenta la legisladora, contribuye al calentamiento global. La iniciativa generó de inmediato un fuerte rechazo entre entidades rurales y legisladores de la oposición, que tildaron el proyecto de “desconectado de la realidad productiva”. “Las vacas existen hace 10 mil años”, señaló una fuente de la oposición a este medio.

El texto presentado plantea que la recaudación se destine a un fondo fiduciario destinado a “compensar” las emisiones mediante programas vinculados al tratamiento de residuos sólidos urbanos. Además, sostiene que el tributo permitiría incentivar prácticas ganaderas más sostenibles y mejorar las condiciones ambientales y productivas en distintas zonas de la provincia.

Klug defendió su propuesta bajo el argumento de que apunta a fomentar el desarrollo sustentable, adoptar Buenas Prácticas Ganaderas y avanzar hacia una mejora del entorno rural y urbano. La Tamba se calcularía en pesos por kilogramo de dióxido de carbono equivalente, en función de la cantidad y el tipo de animales, y otros parámetros que definirá la reglamentación.

La polémica quedó instalada en la agenda política y productiva bonaerense, mientras el sector agropecuario advierte que un nuevo impuesto podría profundizar la ya delicada situación de la actividad.