Crece la tensión en Acerías Berisso: los trabajadores denuncian que la empresa retira materiales de la planta

La tensión entre los trabajadores de Acerías Berisso y los dueños de la planta no da tregua. Este jueves, los empleados denunciaron que la empresa retiró materiales del predio, a pesar de la conciliación obligatoria dispuesta por el Ministerio de Trabajo bonaerense. Ante esta situación, decidieron cortar la calle para impedir que los camiones salgan con los materiales, encendiendo aún más las alarmas en un conflicto que no deja de crecer.

“Están vaciando toda la fábrica”, manifestaron los obreros en diálogo con 0221.com.ar, acompañando sus palabras con un video grabado en las últimas horas, en el que se observa a personas retirando objetos del predio. “Cómo nos cagaron la vida. Van a seguir vaciando la fábrica”, se escucha decir a uno de los trabajadores, visiblemente indignado por la escena.

Los empleados aseguran que no recibieron notificaciones formales sobre ningún movimiento de la empresa, mientras continúan con sueldos impagos desde hace varios meses. Además, remarcaron que los representantes patronales no se presentaron a la última audiencia convocada por la cartera laboral, donde se buscaba acercar posiciones y garantizar la continuidad de los puestos de trabajo.

En total, más de 50 empleados directos y alrededor de 400 indirectos dependen de la actividad de Acerías Berisso, cuya producción sigue completamente paralizada. Desde la Provincia, trabajan contrarreloj para evitar el cierre definitivo y sostener la fuente de ingresos de cientos de familias berissenses.

Toma, intento de desalojo y conflicto sin resolución

El conflicto comenzó en abril, cuando la empresa incumplió con el pago de los salarios. Frente a la falta de respuestas, los trabajadores iniciaron una retención de tareas, que luego derivó en una ocupación pacífica de la planta para evitar el vaciamiento del establecimiento.

Durante esa toma, los empleados resistieron un intento de desalojo por parte de la Policía Bonaerense, acompañados por organizaciones sociales, sindicales y políticas. Sin embargo, pese a la intervención del Ministerio de Trabajo y la apertura de una mesa de negociación, los operarios denuncian que no hubo avances concretos y que la situación actual representa un nuevo golpe a sus reclamos.