Crece la polémica en Berisso: denuncian una clausura “prepotente” y la Iglesia apunta contra el accionar de Control Urbano

Según indicaron fuentes oficiales a Ahora Berisso, la clausura existió y fue apelada por el abogado de la institución religiosa. Sin embargo, añadieron que “al emitirse la multa y la clausura no se aplicaron los procedimientos correspondientes”, lo que abrió un nuevo frente de críticas hacia el área municipal.

Desde la Iglesia aseguraron que el operativo se desarrolló “de forma prepotente”, denunciando que se ejerció un uso desmedido del poder que, según ellos, “discriminó e impidió el normal ejercicio de la libertad de culto”. La sanción incluía una multa superior a 3 millones de pesos y una clausura de 20 días, durante la cual podían utilizar las instalaciones pero no realizar servicios religiosos.

En diálogo con este medio, remarcaron que no buscan confrontar con el Municipio: “No tenemos nada contra nadie, menos contra nuestras autoridades. No estamos en política. Sabemos que Dios nos respalda. Si alguien quiere sacarnos, creemos en la justicia divina que pone y saca”.

Sobre la salida de Gabriela Di Lorenzo, allegados a la exfuncionaria explicaron que su renuncia respondió a “una diferencia de criterio vinculada a la habilitación de un comercio”, aunque la discusión por la clausura continuó siendo parte del trasfondo político y administrativo del caso.