Voz de barrio, visión de futuro: la apuesta platense de Rosario Castagnet

Rosario Castagnet, comunicadora, ex funcionaria y defensora de los valores republicanos, encabeza en segundo lugar la lista de Potenciar en la Octava Sección Electoral bonaerense. Habla de experiencia, compromiso y una nueva forma de hacer política.

"La Plata no necesita más marketing. Necesita respuestas", Rosario Castagnet lo dice con convicción, pero también con cansancio. Cansancio de promesas vacías, de carteles que tapan los problemas reales, de discursos que se olvidan de la gente. Por eso, decidió dar un paso al frente.

Y lo hizo con un mensaje claro: basta de improvisación, basta de obedecer a líderes mesiánicos, basta de callar por miedo o por conveniencia.

Ahora, como candidata a diputada provincial por Potenciar, el espacio que lidera María Eugenia Talerico en la provincia de Buenos Aires, Rosario representa a una nueva camada de mujeres que no llegan a la política por acomodo, sino por experiencia.

Ex funcionaria pública, periodista, madre y vecina de La Plata, su candidatura está respaldada por años de gestión, compromiso y militancia silenciosa en causas que no siempre hacen ruido, pero que cambian vidas.

"En la Octava no nos sobra nada, pero tampoco nos falta fuerza para pelear por lo que merecemos", afirma, en referencia a una región que muchas veces es olvidada en las grandes discusiones.

Desde el colapso del sistema de salud hasta la falta de oportunidades para los jóvenes, pasando por la inseguridad y el abandono de los barrios periféricos, Castagnet quiere llevar la voz de quienes ya no confían en los slogans, pero tampoco quieren resignarse al cinismo.

"No vengo a aprender, vengo a aportar", dice, diferenciándose de aquellos que aterrizan en una banca sin saber qué hacer con ella. En su equipo hay abogados, docentes, médicos y trabajadores sociales.

Pero también hay vecinos, comerciantes y estudiantes. Porque el proyecto de Potenciar no es solo una lista: es una red de personas que creen que todavía se puede hacer política con honestidad, eficiencia y sentido común.

Rosario Castagnet camina la ciudad con los pies en la tierra y la cabeza en el futuro. No promete milagros. Promete trabajo. Y eso, en estos tiempos, ya es mucho.