
Policiales
Al llegar al lugar, los efectivos se encontraron con un adolescente de 16 años que presentaba un corte en su mano izquierda. El joven relató que su propia madre lo había golpeado con una botella de vidrio, causándole la herida.
De inmediato, se convocó a una ambulancia del SAME para atender al menor, mientras que la mujer de 36 años fue aprehendida y trasladada a la comisaría local para ser puesta a disposición de la Justicia.
Tras comunicar el hecho a la UFI en turno, se dio intervención al Servicio Local de Niñez para el seguimiento del caso. Finalmente, la mujer recuperó la libertad bajo lo establecido en el artículo 161 del Código Procesal Penal.