
Exclusivo
En uno de los testimonios, una vecina aseguró que no puede transitar con la silla de ruedas de su hijo debido al deterioro del camino. Ante esta situación, se ve obligada a cargarlo hasta el asfalto para acceder a servicios de transporte.
A esto se suma la negativa de ambulancias y remises a ingresar al barrio, algo que ya generó complicaciones en emergencias recientes, cuando un vecino debió recibir atención médica urgente.
Desde el barrio aseguran que ya realizaron los pedidos correspondientes, pero aún no han obtenido respuestas ni soluciones concretas. “Nos sentimos abandonados. Es una cuestión de derechos y de dignidad”, expresó otra vecina.