Proponen que agentes municipales de La Plata porten pistolas Taser de manera obligatoria

El bloque de concejales del PRO en el Concejo Deliberante de La Plata presentó un proyecto de ordenanza que propone la portación obligatoria de pistolas Taser para el personal municipal dependiente de la Secretaría de Seguridad y de la Secretaría de Control Urbano y Convivencia.

La iniciativa fue ingresada este lunes por el presidente del bloque, Nicolás Morzone, junto al concejal Iván Zanetto, y plantea que los agentes municipales puedan utilizar armas no letales en la vía pública, siempre que cuenten con capacitación previa brindada por el Municipio.

El artículo 1° del proyecto establece la obligatoriedad para el personal de ambas secretarías, aunque también contempla la posibilidad de extender la medida a otras áreas municipales que cuenten con agentes debidamente capacitados y con poder de Policía, en el marco del Código de Convivencia Municipal.

Según el texto, las pistolas Taser podrán utilizarse en casos de defensa propia o de terceros frente a una amenaza inminente, cuando exista resistencia activa a la autoridad municipal que represente un riesgo para el personal, o en operativos conjuntos con la Policía de la Provincia de Buenos Aires, siempre bajo coordinación de las fuerzas provinciales.

El proyecto fija límites claros al uso de estos dispositivos: se prohíbe su utilización sobre personas esposadas o inmovilizadas, embarazadas, menores de edad o personas con discapacidad, salvo en situaciones de peligro “extremadamente grave”. También se prohíbe apuntar o disparar hacia la cabeza, cuello, rostro, entrepiernas o torso superior.

Además, se establece que los agentes deberán contar con al menos dos años de antigüedad, una autorización por decreto refrendado por el intendente, y estar inscriptos en un registro público de personal habilitado.

En cuanto a la formación, los concejales subrayan que los agentes deberán recibir capacitación continua y de calidad, que incluya resolución de conflictos, técnicas de mediación, disuasión, RCP y primeros auxilios, además de formación en derechos humanos.

Por último, el proyecto autoriza al Departamento Ejecutivo a realizar adecuaciones presupuestarias para la compra de los dispositivos mediante licitación pública, y fija un plazo de 30 días desde la aprobación de la ordenanza para concretar la adquisición.

Los fundamentos del proyecto

En los fundamentos, Morzone y Zanetto sostienen que la iniciativa busca crear un marco normativo municipal que permita prevenir y desalentar contravenciones y delitos mediante el uso estratégico de armas no letales.

Señalan que la propuesta forma parte de una estrategia integral de seguridad, junto con la videovigilancia, los anillos de seguridad, las casetas en espacios públicos y las alarmas comunitarias, con el objetivo de fortalecer el orden público y la convivencia ciudadana.

Asimismo, remarcan que la medida permitiría jerarquizar las fuerzas municipales, otorgándoles mayor capacidad de respuesta ante situaciones de riesgo y una mayor proximidad con los vecinos, en un contexto de crecimiento de delitos y contravenciones en la región.

En ese marco, recuerdan que durante la presidencia de Alberto Fernández se habilitó el uso de Taser en la Policía Federal bajo determinados protocolos, y cuestionan al gobierno bonaerense por no avanzar en una regulación similar a nivel provincial.

Finalmente, citan experiencias de otros distritos como San Miguel, Mar del Plata, Zárate, Escobar, Lanús, Ezeiza, Tres de Febrero y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, donde aseguran que la implementación de estas armas no letales contribuyó a reducir los niveles de delito.