El pasillo de la vergüenza: Estudiantes le puso freno a la improvisación de la AFA

La polémica se desató cuando la AFA decidió otorgarle el título de campeón de la Tabla Anual a Rosario Central, una medida que carece de lógica deportiva. Un campeonato no puede inventarse o redefinirse una vez que la etapa regular del torneo ha finalizado, no importa cuán buena haya sido la campaña del equipo rosarino.

Los jugadores del Pincha salieron al campo detrás del árbitro Pablo Dóvalo y, en el momento en que Ángel Di María y sus compañeros ingresaron, se quedaron de espaldas, en un silencio elocuente. No hubo aplausos. Fue un mensaje directo, en nombre de todos los hinchas del fútbol que exigen coherencia y respeto por los reglamentos.

Naturalmente, la gente de Rosario Central reaccionó con insultos contra la delegación visitante, sintiendo la protesta como una ofensa personal. Incluso se escuchó el cántico "el que no salta es un inglés" al presentarse la copa, demostrando que el conflicto se instaló con fuerza en el campo.

El clima se había caldeado en la semana con un cruce de alto voltaje en las redes sociales. Pablo Toviggino, tesorero de AFA y mano derecha del presidente "Chiqui" Tapia, atacó públicamente a Juan Sebastián Verón, presidente del club platense.

Toviggino se dirigió a la "Brujita" con un posteo intimidante, en clara represalia por el intento de Estudiantes de desligarse de la votación que terminó beneficiando al Canalla. Olé reprodujo textualmente el mensaje de Toviggino: "Que 2026 Te/Nos Espera !! Cuídate mucho Boina multicolor. Ahora a Cumplir el Reglamento, que establece el Ente Rector, la Asociación del Futbol Argentino. En Fin …".

Este episodio no es contra Rosario Central, cuyo mérito en la campaña nadie discute, sino contra la improvisación y la falta de seriedad de quienes conducen el fútbol argentino. La AFA debe entender que la credibilidad de un torneo se basa en la estabilidad de sus normas.