Cristina Fernández de Kirchner volverá a ser el centro de la escena política este miércoles, cuando una movilización de magnitud histórica la acompañe desde su domicilio en el barrio porteño de Constitución hasta los tribunales de Comodoro Py. La marcha, que recorrerá unos 5 kilómetros, se realizará en el marco de la ejecución de la condena dictada por el Tribunal Oral Federal N° 2 en la denominada Causa Vialidad.
Desde el Partido Justicialista y los principales espacios que integran el Frente de Todos aseguran que se trata de una “movilización pacífica, popular y masiva”. Según adelantaron organizadores cercanos a Máximo Kirchner y Mayra Mendoza, se espera la participación de al menos 500.000 personas, aunque no se descarta que la cifra supere el millón.
El operativo político
La movilización es vista como un gesto contundente de apoyo a la exmandataria en medio de uno de los momentos más difíciles de su carrera judicial. Fuentes del PJ remarcan que el operativo está pensado para "mostrar que Cristina no está sola" y que la militancia sigue activa y dispuesta a defender a su principal referente.
El recorrido incluirá distintas columnas que partirán desde puntos estratégicos del conurbano bonaerense y del interior del país. Se espera que agrupaciones como La Cámpora, el Movimiento Evita, la CTA y sindicatos vinculados al kirchnerismo movilicen miles de micros hacia la Ciudad de Buenos Aires.
Seguridad y logística
El Ministerio de Seguridad de la Nación, en coordinación con la Policía Federal, ya trabaja en un amplio operativo que incluirá cortes de calles, vallados y presencia de fuerzas de seguridad en toda la zona de Comodoro Py. También se dispuso un dispositivo de asistencia médica y puntos de hidratación para quienes participen de la movilización.
Además, desde el entorno de la expresidenta confirmaron que Cristina brindará un discurso en las inmediaciones de los tribunales, lo que refuerza la expectativa de una jornada de alto voltaje político y mediático.
La marcha se produce pocos días después de que la Corte Suprema dejara firme su condena a seis años de prisión e inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos. Aunque todavía no hay una fecha definida para la detención o eventual prisión domiciliaria, el entorno de CFK apuesta a visibilizar lo que consideran una “persecución política, mediática y judicial”.
En paralelo, su defensa ya elevó una denuncia a la Corte Penal Internacional y también pidió prisión domiciliaria. El escenario judicial sigue abierto, pero la calle empieza a jugar un papel clave en la estrategia kirchnerista.
